¡Reflexionemos!

Ser profesional en Gerontología es un 

asunto eminentemente de índole personal 

más que de índole académico o cognoscitivo. Es decir, cualquier persona con inteligencia suficiente puede cursar un posgrado 

y graduarse, pero enamorarse realmente 

de esta labor, ubicarse en sus demandas 

y alcances, es un asunto que va más allá 

de los elementos eminentemente cognoscitivos.

EL Gerontólogo es un profesional formado para estar en contacto directo con uno de los más débiles eslabones entre los grupos sociales actuales, lo cual le exige una formación con un basamento arraigado en individuos y comunidades, en una relación estrecha, primaria, con una dimensión humana de la existencia, rescatando así las relaciones personales en su preparación profesional. sin olvidar su inserción en la institución pública o privada donde labore, el Gerontólogo no debe perder el contexto moral y humano que implica el trabajo con Adultos mayores, un universo frágil donde impone con mayor fuerza un delicado equilibrio entre la técnica y la ética, entre el hacer y el ser. La profesión no debe olvidar al hombre.

Necesitamos de tus sugerencias para seguir mejorando....

¿Que opinas de este espacio habilitado para ti?

¿Que puedes decirnos acerca del contenido que se encuentra en este blog?